El día que cumpliste nueve años levantaste en la playa un castillo de arena. Sus fosos se llenaron de agua de mar, en sus almenas ardió la eternidad del sol, sus patios fueron incrustaciones de coral y reflejos. Los extraños se acercaron para admirar tu obra. Saciado de escuchar que tu castillo era perfecto, volviste a casa lleno de vanidad. Pasaron ya doce años desde entonces. A menudo regresas a la playa, intentas encontrar restos de aquel castillo. Acusan al flujo y reflujo de su demolición. Pero no son culpables las mareas: bien sabes que alguién lo abolió a patadas -pero algún día el mar volverá a edificarlo.
JE Pacheco
Saturday, July 07, 2007
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3 comments:
je, y hacia mucho tiempo que yo tampoco venía por acá... me encuentro con buen material, un saludo!
Carloss!!!!
¿Como estas?? ¿Cuando visitas Puebla? ya te extrañaba jeje.
Saludos grandes y un abrazo ;)
Mejor que lo vuelva a construir él mismo, cda vez que alguien o algo lo derrumbe. Un saludo y espero que puedas visitarme.
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